Medio Cielo en Acuario en la Carta Natal

La ambición por lo nuevo y el deseo de hacer algo de valor en la carrera están impresos en este posicionamiento. Acuario es una energía bien adaptada al futuro y sus posibilidades, un signo idealista y favorable al progreso, aunque radical. Tener en Medio Cielo, la cúspide de Casa 10 en la carta astral, puede convertir al nativo en un excelente comunicador y intensificar la sensación de que debería dejar el mundo un poco mejor que cuando lo encontró.

Las nuevas tecnologías, los descubrimientos científicos, la tendencia a trabajar en revoluciones tecnológicas y con la tecnología de la información son cosas que pueden resultarle atractivas. También puede estar interesado en la investigación, en nuevos métodos y soluciones a muchos problemas y cuestiones de su tiempo. Si no tiene una tendencia científica o matemática, podrá usar su claridad intelectual de otras formas, como en áreas de enseñanza y marketing, por ejemplo. Además, puede ser muy bueno al tratar con grupos, como un entrenador, un director de proyecto, un líder sindical o una persona integradora con una gran red de contactos a su disposición.

Tal posicionamiento a menudo inspira el deseo de participar en alguna forma de activismo o de ser escuchado en el grupo. Asimismo, como rige lo nuevo, Acuario también tiene influencia sobre cosas antiguas, haciendo que parezcan nuevas. Le encanta ver cambiar a las personas y situaciones, preferiblemente para mejor.

Convertirse en un guía entre la multitud

Debajo del idealismo y del espíritu comunitario en la cúspide, se encuentran la creatividad y el amor propio del Fondo del Cielo en Leo. Sin embargo, debe tener cuidado con una manía por la grandeza y un interés exclusivo en sus propias opiniones. Aunque es democrático en sus discursos, puede volverse terriblemente autoritario y exigir que los demás se amolden a su liderazgo, prácticamente obligando a la gente a seguir su camino y sus opiniones.

Quizá deba ser más coherente con las palabras de su propio discurso, que suele ser colectivista, y reconocer los esfuerzos del grupo además de su propia contribución. Cuando logre superar el ego leonino en su base, podrá convertirse en un ejemplo de singularidad como guía para los demás, mejorando la conexión en su círculo social.